SAEL
Su necesidad de mostrar aquello que le conmueve es lo que lleva a la artista a iniciarse en la pintura.
Decide estudiar ilustración y artes plásticas que le sirven como base para su desarollo. Realiza posteriormente varios cursos como arteterapia que amplian su necesidad de hacer su propia mirada de otras miradas.
Crea con el objetivo de sacar el interior al exterior y la grandeza de sentir y hacer sentir.
Mediante una base de café, pinturas, papeles, telas y otros materiales cotidianos crea sus radiografías de almas.
Con su obra pretende plasmar aquello que no se ve, nuestro yo interior, nuestro ahora, nuestra eséncia.
Utiliza rostros de mujeres inventadas como medio para exteriorizar un sentimiento, un estado anímico, en definitiva, una historia.
Una historia que ellas nos explican con sus miradas especiales, con sus marcas en la piel, con sus texturas y colores, con sus ganas de ser comprendidas y miradas.